El hombre se encuentra acusado de haber participado en un fraude electrónico millonario contra el estado de Nueva York, cometido mediante la sobrefacturación por trabajos en el sistema eléctrico de escuelas públicas. Tenía pedido de captura desde 2016.
Para la justicia, el riesgo que genera la utilización del homebanking para el otorgamiento de un préstamo no tiene porqué trasladarse al consumidor.