El Poder Ejecutivo Nacional resolvió suspender “toda erogación económica vinculada a apoyos y aportes institucionales”, así como “todo apoyo económico destinado a las Provincias y a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires”. La medida implica la falta de renovación de los contratos existentes.
Se trataba de una medida que garantizaba la exhibición de películas nacionales en salas comerciales del país.
Las películas recibirán el subsidio a la producción si logran alcanzar la cantidad de espectadores necesarios; respecto a los transportes, los kilómetros improductivos y las rutas secundarias que produzcan pérdidas “no serán incluidos” en el nuevo esquema.